
Todos los hombres se llaman Ernesto.
Todos ellos son tranquilos, callados e impertérritos (casi aburridos).
Pero una vez regalada su arma inaugural en la pubertad, una vez en el campo de batalla, son sanguinarios e inconmensurablemente abrumadores
Todos ellos son tranquilos, callados e impertérritos (casi aburridos).
Pero una vez regalada su arma inaugural en la pubertad, una vez en el campo de batalla, son sanguinarios e inconmensurablemente abrumadores
(un respiro).
Todos los Ernesto son hombres y todos los hombres morirán algún día.
Todos los Ernesto son hombres y todos los hombres morirán algún día.
5 comentarios:
un campo de batallas lleno de ernestos
gracias por acompañarme
te entendi perfecto...
algo que no se puede traducir...
me encanto
sencillo y a la vez profundo
como las cosas importantes de la vida
quiero el fin del mundo
wuajajjaja
que inevitable.
Por unas semanas, aún recuerdo.
Un abrazo de trencito un ardillaso de felicidad y de sonrisas y y y y mi amistad para un siempre largo :)
estoy para lo q' necesites.
:)
oye no, no todos somos Ernesto. Ernesto es sólo una fase temporal.....¿o no?
Publicar un comentario